Permitan que me presente una vez más: soy el Señor Topo del Toboso, conocido como Topo por mis amigos, aunque no me molesto si se dirigen a mí como Señor Topo. Soy una vieja rata calva, y mi vida se ha dedicado a acompañar a Don Gato III de Dos Rocas en sus aventuras por el vasto mundo. Me gusta considerarme un explorador amateur aunque debo reconocer que mi amor yace en anotar cada maravilla y misterio que encuentro en mis viajes para poder, más tarde, compartir mis escritos. Si me lo permiten, me gustaría empezar contándoles acerca de un lugar muy especial llamado TRENCADAUS.
TRENCADAUS es un mundo creado por las mentes de Jordi y Susana, dos humanos que nos encontraron a Don Gato y mi en una de nuestras aventuras, donde salimos un poco mal parados, y decidieron acogernos y cuidarnos hasta que nos recuperamos. Ellos hablan de TRENCADAUS como una empresa de juegos; todavía no he logrado descifrar qué es exactamente una “empresa” pero estoy pendiente.
Lo que sí puedo asegurarles de TRENCADAUS es que se trata de un mundo único. Don Gato apenas ha comenzado a explorarlo pero ya nos hemos encontrado con civilizaciones completamente opuestas. Visitamos un continente fascinante donde parece que sus sociedades parecen estar desarrollándose por primera vez pero ya hablaremos de ellos en otro momento. Durante nuestra última visita a Trencadaus, Don Gato me llevó a un museo del cual me aseguró contaba con la mayor colección de reliquias que me podría imaginar. Como gran aficionado a la Historia que soy, me pareció una visita obligada: no hay mejor manera de conocer un lugar que conociendo primero su historia. Sin embargo, cuando llegamos al Gran Museo, nos encontramos con la exposición cerrada. Parece que la gran colección de reliquias ha traído a una serie de indeseados ladrones que pretenden hacerse con ella… No llegaré a entender jamás la codicia de algunos individuos.
Después de tremenda decepción, volvimos a casa para reorganizar nuestro viaje: Don Gato quiere seguir avanzando por el territorio de Trencadaus pero en mi humilde opinión, las tribus emergentes del continente que les he mencionado antes son más fascinantes. Ojalá Don Gato recapacite y me dé la oportunidad de volver allí.
Pero, disculpen, que me desvío del tema. Quería decirles que la vuelta a casa fue muy curiosa: durante nuestra pequeña ausencia, parece que Jordi y Susana han estado avanzando en sus propias aventuras. No dejo de escucharles hablar sobre un proyecto que están a punto de revelar al mundo. Don Gato está muy emocionado, cree que se trata de un juego de mesa y me ha asegurado que se llama “CRAZY MUSEUM”. Aunque las actividades lúdicas no suelen ser de mi agrado, el nombre por sí solo despierta curiosidad, ¿verdad? Desde nuestra llegada, se respira emoción en el aire, y sospecho que este juego, conociendo a Jordi y Susana, podría acabar siendo algo extraordinario.
Por lo que respecta a este proyecto, “CRAZY MUSEUM”, traigo más noticias, apreciados lectores. Resulta que Jordi y Susana están en busca de una ilustración para su presentación así que han lanzado un concurso que les tiene muy emocionados. A pesar de mis esfuerzos, no he logrado obtener más detalles sobre este asunto, pero prometo que seguiré investigando y regresaré pronto con más noticias.
Lamentablemente, creo que es hora de despedirme por ahora. Me parece que escucho a Don Gato llamando mi nombre, y debo cumplir con mi deber. Hasta la próxima, estimados lectores.
¡Que las aventuras continúen!